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Full text of "Reino del apostata"

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reino óel apóstata 

diego cubelli 




Diego Cubelli. 

Nació en Montevideo a 
las 17:32 horas del 9 de 
mayo de 1990. 

Sus múltiples intereses 
lo han llevado a cursar 
estudios sobre diversas 
materias, aunque 
fundamentalmente es 
autodidacta. 

Estudió gestión cultural, tuvo una editorial y dirigió 
dos revistas de poesía. 

Es músico, bandoneonista y arreglador. 

Como poeta publicó su primer libro en 2008, aunque 
la primera publicación oficial es la plaqueta Poema 
con zapato de 2011. Le siguieron los libros Reino del 
apóstata, con prólogo de Alfredo Fressia, editado por 
LoQueVendrá en 2014, Trabajo para el silencio, editado 
por Yaugurú en 2015 y La razón del deslumbre, editado 
por Itabira en 2020 con prólogo de Claudia Magliano. 
Algunos de sus poemas han sido traducidos al inglés y 
portugués. Parte de su obra fue publicada en diversas 
revistas y antologías especializadas. 

Desde 2018 coordina el ciclo de lectura Sitio de poesía 
en la Fundación Mario Benedetti. 

A partir de 2018 y por dos períodos consecutivos 
ejerce como Secretario en la Casa de los 
Escritores del Uruguay. 

Contacto: dondedicediego@gmail.com 





reino óel apóstata 

oiego cubelli 



itabira 


EDITORA 


Diego Cubelli. 

Prólogo: Alfredo Fressia. 

Primera edición: LoQueVendrá ediciones. Octubre de 2014. 
Segunda edición corregida (digital): Itabira Editora. Julio de 2020. 


ISBN: 978-9974-99-667-0 
Diseño e ilustraciones del autor. 


Prólogo para la primera eóición 

Alfreóo Fressia 


Se podría decir así: Diego Cubelli nació en Montevideo 
en 1990 y este es su primer libro. 

Al situar al poeta en el espacio y el tiempo, el lector po¬ 
drá figurarse, por ejemplo, la gran juventud de un autor 
que nos entrega su Reino enteramente conquistado en 
el siglo XXI uruguayo. No es poca información, por cier¬ 
to. Pero Diego siempre reserva sorpresas a su público. 
Porque hay varios Diegos en Diego, y superpuestos. Por 
ejemplo, es útil que los lectores de estos poemas se¬ 
pamos que se trata de un músico eximio, intérprete del 
bandoneón, el instrumento que, según la tradición, sería 
el más difícil, o el más exigente de todos. 


7 

Reino 

del 

apóstata 


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Reino 

del 

apóstata 


Y el bandoneonista, es también editor de Lo que ven¬ 
drá, una de las pocas revistas de poesía de este Uruguay 
del siglo XXI. Y además este editor publica también en 
su sello homónimo a poetas nacionales. Y lo hace como 
acto de amor, que no otra cosa ha de ser la edición de 
poesía. A saber, edita con criterio crítico -todo editor es 
o debería ser un crítico literario- y con la dedicación 
artesanal de quien literalmente diseña, arma, imprime 
y pega cada ejemplar. 

¿Hay más Diegos? Sí, el poeta. El tanguero y el editor no 
escondían la ñata contra el vidrio de la poesía, claro, y 
esto desde dos plaquettes -de poquísimos, contados 
ejemplares cada una- donde el poeta había reunido tex¬ 
tos que nacieron bajo el asombro de la poesía. 

Asombro que exigía una reñexión, esta que se hizo 
poesía y que el lector tiene ahora en sus manos bajo la 
forma de un primer libro autoral. Diego sitúa su reñexión 
a partir de un canon de autores nacionales en este Uru- 


guayya enteramente entrado al milenio, pero lo hace 
con vocación universal, bien plantado en su territorio y 
sin ningún límite localista. 

Así, el poeta comienza su obra, la que se extenderá en el 
tiempo, pensando a la poesía -no había mejor augurio 
para una obra poética-, reconociendo su instrumento, 
así como debe de haber estudiado durante años su otro 
instrumento, el musical, el difícil. Y uno puede aventurar 
que su labor de editor lo ha auxiliado, porque sin duda 
los años de contemplación forman parte de la larga, 
intensa formación de un poeta. 

Eso sí, aquí la primera persona entra en un planeta 
sin gravedad y pierde peso. Ocurre con quien aprende 
filosofía y descubre la parte de azar en la creación - 
dados, timba y, claro, la poesía cruel de no pensar 
más en uno mismo. 

Más bien, surge de la reñexión autoral - de este largo 
poema, o de este poemario orgánico- una poesía que no 


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Reino 

del 

apóstata 


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Reino 

del 

apóstata 


es representación del mundo sino signo nuevo, creado, 
buscado y colocado en el mundo por el creador. "Apos- 
tasía”, en griego, es un "alejarse” (anóoiaoiq), y la gran 
renuncia de este apóstata, autor de un reino, va más allá 
de negarse a ser mero signo del mundo, es también la 
renuncia al silencio. 

Al cerrar este libro, uno podría decirle a su autor: Ya 
no podrás callarte más. Pasaste la vidriera, ahora es¬ 
tás adentro. El asombro se te hizo carne, el azul de frío 
tomó cuenta de ti y te convirtió en este poeta al que se¬ 
rás fiel, Diego, apóstata nuestro, te guste o no. Y sabías 
que es cuajo arduo la poesía. Adelante, ahora es tu vez. 


arduo cuajo 


La poesía, si es, es arduo cuajo.' 
Cecilio Peña 


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Reino 

del 

apóstata 



I 


puede que entender los gestos 
sacrificar el oído por algo mejor 
simplifique la tarea 

puede que a estas alturas 
traicione 

liturgias el paladar 
y no alcance con desnudar versos 
para imitar dudas 

es límite del asombro 
no acudir 
a las preguntas 


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Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


II 


quien dice distancia perforada 
ilegible de años 
o disculpas guturales del amor 

miente 

la firma es la poesía 
y no hay aquel que lo grite 
o lo susurre 


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Reino 

del 

apóstata 


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Reino 

del 

apóstata 




No es saltar la cuerda 

ni llegar al cielo 

con solo tirar una piedra 

ni morir ocho horas diarias 
bajo el dominio de la piel 

es despertar manos 
y abanicar el fuego 
por si arde 


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Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


IV 


el mínimo músculo descansa 

duele y dolería más 
si no fuera de papel 


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Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


V 


fuera del papel 
las ñores negras del tango 
amanecidas en la sencillez 
de ocho dedos 
cuatro por mano 

también arduo cuajo 
de humedad y uñas 
oídos destrozados 

por un gatillo que abre y cierra 
el fuelle y la cabeza 


21 

Reino 

del 

apóstata 



22 

Reino 

del 

apóstata 


VI 


tejida para amanecer en los rincones 
sobre los pies de un olvidado poeta 
es luna negra de viejo fonógrafo 
un clavo en la sien 


23 


Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


reino del apóstata 


"El poeta es un apóstata, 
inevitablemente." 
Washington Benavides 


25 

Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


I 


el poeta 

imagina cómo los hilos 

cuelgan del inútil retorno de la imagen 

pobre del que piense en entender 

pobre del que entienda 
y seduzca mujeres con voz engominada 


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Reino 

del 

apóstata 


así es el asunto 


Reino 

del 

apóstata 


respiraría segmentos afónicos del aire 
límite o borde 
diría durante la palabra 
saquen conclusiones 


29 


Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


traducir finales 


cuentagotas del piano sacudido por una idea 
todo está podrido 

y la poesía? 31 

Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


IV 


tiembla y no deja de temblar 
aunque lo sepa o lo intuya 

es el reino del apóstata 
que seduce al tiempo 
y nace 


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Reino 

del 

apóstata 



34 

Reino 

del 

apóstata 




V 


juntar en botella todas las formas del morir 
mirar hacia adentro 
y ser niño 


35 


Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


VI 


se traduce en inviernos la música de los párpados 

gira desértico un gallo 

cuál es la realidad imaginada 

pregunta 


37 


Reino 

del 

apóstata 



38 

Reino 

del 

apóstata 



Vil 


si fuera por los hijos 
que no habitan 
cerebro 

trabaja ahora cuanto puedas 
anunciaría el nacimiento 
fuera de la sangre 
y otras salivas 

si fuera por vivir 
preguntaría 


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Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


reino de todavía 


Dios le llaman algunos, otros Comercio, 
mas para mi es el Reino de Todavía." 
Silvio Rodríguez 


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Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


trabaja corazón 

niño amuleto de cerrazón y vuelo 
inútil 

único elemento para vivir 
y ser 
un punto 
una coma 
un número 

un no en la boca de los otros 
ojos que perdiendo altura 

miran todavía 

en el tiempo profundo de la sangre 


43 

Reino 

del 

apóstata 





andarás vacío y aire 


todavía es noche 
y no hay quien comprenda 
la soledad de cartón 


la misma voz que canta 


45 

Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


hay un frío acordado en los lentes del poeta 
oficio no cesa al viento de permanecer 
inmóvil ante el ritmo azul 
de la frontera 


47 


Reino 

del 

apóstata 


Reino 

del 

apóstata 


IV 


y habrá que quebrar huesos 
para abrir el esperma de la poesía 
y patear puertas 
si duele lo perdido 


49 


Reino 

del 

apóstata 



50 

Reino 

del 

apóstata 


V 


por qué salir de ese líquido 
si fue mundo alguna vez 
si afuera todavía frío 
el invierno no termina. 


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Reino 

del 

apóstata 



orden óel libro 


Prólogo | 7 
arduo cuajo | 11 
reino del apóstata | 25 
reino de todavía I 41 





itabira 

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